Para muchas personas la palabra "apócrifos" significa, simplemente, obra de ficción, carente de veracidad o sin ningún valor.
Un relato apócrifo respecto de un personaje histórico es un cuento fabricado, y a menudo exagerado. Sin embargo, este, no es el significado del término cuando se aplica a los antiguos escritos que conocemos como los "apócrifos" del Antiguo Testamento.
La palabra significa en griego "lo oculto", es decir, "los libros ocultos", y el empleo de la misma para los escritos se remontan al gran erudito bíblico Jerónimo (muerto en 420 d. C.). Este sostenía que estos libros que se encontraban en las Bíblias griegas y latina pero no en la Biblia hebrea de la época, no debían considerarse como igualmente autoritativos que los libros canónicos, aunque podían leerse en la iglesia para edificación. Al emplear el término "apócrifo" , aludía probablemente a la distinción hecha en 4 Esdras 4:14ss., uno de los libros apócrifos, entre los 24 canónicos del Antiguo Testamento (39 según nuestro recuento), y otros que contenían conocimiento y misterios esotéricos adecuados solo para los sabios y que en consecuencia debían mantenerse "ocultos" para el público en general.
En ciertas ocasiones el clero romano acusa a los evangélicos de que las versiones de la Biblia de éstos están "truncadas" y que las Biblias llamadas "evangélicas" son diferentes a las católicas. Para muchos, la verdad sobre el tema, es un enigma. Es mi propósito en el presente estudio, aclarar, hasta donde me sea posible, esta cuestión.
La versión oficial de la iglesia Romana, es la Vulgata.
Las versiones evangélicas constan de 66 libros, pero la Vulgata, tiene 73. En el Nuevo Testamento no hay ninguna diferencia, pero no ocurre lo mismo en el Antiguo. La Vulgata contiene los mismos 66 libros que constituyen nuestras versiones; pero además tiene añadidos los siguientes libros y capítulos:
LIBROS: Tobías, Judith, la Sabiduría, el Eclesiástico, Baruc y los dos libros de Macabeos.
¿Qué utilidad tienen los apócrifos para el cristiano de hoy? Subsiste el problema teológico de su autoridad. Debemos reconocer el hecho de que los cristianos nunca han tenido acuerdo perfecto respecto a los límites exactos del Antiguo Testamento, aunque están de acuerdo en afirmar su autoridad e inspiración, Hay ciertas pruebas de que la Biblia que Jesús y los apóstoles tuvieron como autoritativa, era la Biblia hebrea de 39 libros, y derivada (o dependiente) de ellos.
Pero si bien los cristianos no pueden dar a los apócrifos la misma posición que a los libros del Antiguo Testamento hebreo, encontrarán en ellos pasajes de profunda piedad y espiritualidad.
En Gracia Abundante, John Bunyan relata cómo, en busca del versículo, "Mirad a las generaciones de antaño y ved: ¿Quién se confió al Señor y quedó confundido?", al principio se sintió intimidado al encontrarlo en los apócrifos (Eclesiástico 2:10). Pero vino a darse cuenta de que "como esta frase era el resumen y esencia de muchas de las promesas, era mi deber sacar consuelo de ella, y bendigo a Dios por esa palabra, porque para mi provino de Dios". Quien lee los apócrifos con devoción sabrá cómo tomarlos, porque discernirá, como lo hace siempre que lee literatura religiosa, entre los que está de acuerdo y lo que no está de acuerdo con los elementos esenciales de su fe.
gracias por el aporte pero los enlaces no valen
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